Ante la emergencia sanitaria que vive el país y en vista del compromiso de la UV de continuar con el proceso educativo, el 6 de abril se inició el año lectivo de pregrado tanto para los nuevos estudiantes como para los cursos superiores en la modalidad online, dada la recomendación de permanecer en casa.
Fue una experiencia nueva tanto para docentes como estudiantes de toda la Universidad y, por cierto, también de la Escuela de Medicina, quienes se conocieron (primer año) o se reencontraron (cursos superiores) a través de clases virtuales, apoyados en las diversas plataformas que puso a disposición la UV.
Para ello, durante marzo se capacitó a los docente en las plataformas, aplicaciones y herramientas digitales que dispone la UV para que pudieran adaptar sus procesos de enseñanza a una modalidad virtual, con videoconferencias masivas y material alojado en la nube.
Asimismo, la universidad realizó un importante despliegue para lograr identificar a sus estudiantes que requerían algún tipo de ayuda, ya sea en cuanto a equipos o conectividad, y así asegurar de que todos pudieran participar en igualdad de oportunidades en este nuevo año académico.
Daniel Casanova, profesor de Anatomía en Organismo Humano I, Medicina sede San Felipe, dijo que dado el contexto de crisis sanitaria, “siento que hay buena disposición de todos, académicos y estudiantes, para que esto resulte. En esta primera semana seguramente habrán muchos ajustes que realizar, pero se logró una buena comunicación y transmitir los lineamientos básicos de la asignatura para luego echar a andar todas las metodologías que serán experimentadas en el curso. Espero salga todo bien, está la voluntad, la conectividad y las habilidades para hacerlo, así es que es un muy buen comienzo”.
En relación a las aplicaciones para generar las clases en línea, Jorge Pozo, coordinador de Organismo Humano I, comentó que el año pasado, a raíz del estallido social, comenzó a utilizar Meet que ofrece Google, que es bastante amigable, aunque tenía la limitante que no poder ver a todos los participantes simultáneamente.
“Estos días he usado Zoom y creo que es fantástica, está muy bien pensada porque permite programar una reunión con antelación con todos los pasos. Puedes grabar, la conectividad es muy buena y las interferencias pocas. Además mientras uno habla puede compartir pantalla y mostrar un documento; tiene pizarra virtual, chat y permite a los alumnos levantar la mano”, dijo.
Recurso audiovisual
En la sede de Reñaca, la profesora María Elizabeth Guerra Zúñiga, docente del Departamento Salud Pública de la Escuela de Medicina, indicó que durante las semanas previas estuvo explorando las plataformas web para grabar videos y ha ido aprendiendo sobre la marcha.
“Grabé clases usando Loom, que permite hacer videos sin tope de minutos, por tanto es más fácil seguir el hilo de una clase tradicional; sin embargo, al querer hacer contenidos sobre cálculos sencillos se me dificulta mucho la tarea, dado que no tengo cámaras o pizarra para poder mostrar cómo se hacen estas operaciones matemáticas, lo cual me frustra un poco”, reconoció.
Para desarrollar clases ha utilizado Zoom, aunque reveló que no es muy diestra con la aplicación. “Esta permite compartir pantalla y por tanto interactuar. En paralelo voy mirando el chat para responder preguntas, pero no es tan sencillo congeniar todo al mismo tiempo. Me falta práctica”, dijo.
Ha privilegiado hacer videos cortos, tipo cápsulas, con tareas para los estudiantes, de manera de retomar y cerrar la clase con las ideas fuerza que quiere que piensen y se lleven. Y refuerza con artículos obligatorios posteriores a las clases.
Dado que se ha apoyado mucho en videos, resolvió crear su canal de Youtube para las clases. “En la vida pensé hacer algo así. Sin embargo, tiene la bondad de transmitir en vivo, lo que estoy pensando seriamente en usar las próximas semanas. Estoy intentando hacer de esta nueva forma de clases algo más cercano a mis estudiantes”, expresó.
La académica coordinadora de Salud y Sociedad II en San Felipe, Daisy Iturrieta, comentó que en su primer encuentro virtual con los estudiantes, lo primero fue conocer el estado emocional de ellos y ellas, compartir cómo se encuentran, angustias, temores, desafíos y compromiso de trabajo colaborativo para que esta nueva modalidad funcione. “Esta parte fue importante, creo que necesitan poner en valor sentimientos y emociones”, dijo.
Acerca de los contenidos dispuestos en la nube, detalló que elaboró videos, uno para auxiliar la presentación del programa y el otro una clase grabada. Posteriormente hizo una videoconferencia por Zoom, donde los estudiantes participaron activamente, espacio que usaron también para analizar noticias vinculadas al Covid-19. Por último, indicó que las tutorías con grupos pequeños las realizarán por Meet.