Preeclampsia y pretérmino fueron los temas abordados en el IV Simposio de Salud en el Embarazo, organizado por la Escuela de Medicina UV, que convocó a especialistas de los hospitales de Los Andes y San Felipe, docentes y estudiantes de las carreras de Obstetricia y Medicina UV Campus San Felipe.
La jornada contó con la participación de destacados especialistas, entre ellos, la doctora Paulina Zúñiga, gineco-obstetra, jefa urgencia obstétrica del Hospital San Camilo y docente de Medicina UV, quien detalló que cerca del 8% de los partos de dicho centro asistencial terminan con algún tipo de síndrome hipertensivo.
Cabe mencionar que la preeclampsia es un síndrome de causa desconocida que se puede presentar desde la semana 24 del embarazo, aunque mayormente desde la semana 34 de gestación. Una vez que aparece en la gestante, puede tener consecuencias graves para la salud e incluso fatales para la madre o el feto. De ahí la importancia de las investigaciones que se desarrollen en torno a este tema.
“El desafío actual que tenemos es implementar el radio angiogénico que permite predecir las complicaciones y mejorar el manejo en las usuarias. Hoy, se tomaron por primera vez muestras en el valle y fueron enviadas a Santiago para su análisis. Esperamos implementarlo en San Felipe y tener el kit en el laboratorio del Hospital San Camilo, ya que es de alto costo. Esto nos permitiría reducir la estancia hospitalaria, porque con este examen sabemos que la paciente no se va a complicar”, indicó.
Agregó que existen algunos como indicadores, como: la presión arterial en el primer trimestre, el doppler de uterinas en el primer trimestre y la historia previa de la paciente que permiten hacer un cálculo de riesgo que entrega un modelo de predicción acerca de qué paciente podría presentar el síndrome. “En esa paciente intervenimos y prevenimos con aspirina, calcio, ejercicio físico y control seriado de pesquisa de presiones elevadas y de las ecografías”, precisó.
Si bien tras el parto se revierte la preeclampsia, las pacientes podrían tener alguna consecuencia o desarrollar hipertensión crónica a raíz de ella.
En tanto, el doctor Roberto Villalobos, bioquímico, docente de Medicina UV, indicó que se cree que algún porcentaje de las preclamsias ocurren por alteraciones en la implantación de la placenta, pero no todas. “Generalmente las que se desarrollan antes de la semana 34 a 35 de gestación, preeclampsia temprana, están asociadas a un problema en la implantación de la placenta. Pero la mayoría de las preeclampsias (cerca del 90%) ocurren al final del embarazo, tras la semana 35, las cuales se creen están asociadas a una condición de la madre más que de la placenta, como: obesidad, diabetes, hipertensión o, incluso, una difusión endotelial ya presente en la mamá. No obstante, no todas las gestantes con estos factores desarrollan preeclampsia”, acotó.
Además, expusieron el Dr. Ivo Carrasco Wong, con el tema “Alarminas en preeclampsia: impacto inmediato y a largo plazo en la salud vascular materna” y la Dra. Delia Chiarello con los resultados de la investigación “Polución de aire y parto de pretérmino en gestantes en Santiago”.
Al respecto comentó que observaron compuestos aromáticos policíclicos aumentados en plasma de gestantes con parto de pretérmino (34 semanas) cuando se compara con plasma de gestantes de término, lo que podría estar asociado al desencadenamiento del parto de pretérmino, es decir antes de las 37 semanas de gestación.
