Las doctoras Kenia López y Soledad Bustos junto al doctor Pablo Belmar son los primeros residentes de la beca de Medicina Familiar (Viña del Mar) de la Escuela de Medicina de la Universidad de Valparaíso en realizar una rotación clínica en el Hospital Psiquiátrico Philippe Pinel.
Si bien el programa de la especialidad médica se desarrolla paralelamente en forma íntegra también en campos clínicos de Aconcagua, desde este año, las y los becados de Viña del Mar comenzaron a realizar la rotación correspondiente a psiquiatría en el renovado hospital, ubicado en Putaendo.
La coordinadora de la Unidad de Postgrado, Postítulo y Educación Continua, profesora Daisy Iturrieta, sostuvo que este es un inicio que nos ha permitido fortalecer el trabajo de la beca en el Valle del Aconcagua, propiciar un espacio formativo que da cuenta de un espacio de calidad y contenido, pero por sobre todo con experiencias de aprendizaje únicas y valorables. Esto nos va a permitir fortalecer el trabajo entre el pregrado y el postgrado”, señaló.
En tanto la asesora en la relación asistencial docente del Hospital, doctora Iris Boisier, sostuvo que vienen trabajando hace más de un año en la formación de esta especialización médica.
“Abrir nuestro hospital a la docencia de formación de postgrado es un anhelo que tenemos desde hace muchos años y finalmente tenemos el primer grupo de becados de Medicina familiar que están conociendo la experiencia del Hospital Philippe Pinel, lo que significa avanzar hacia el desarrollo académico. Ya tenemos una experiencia en la formación de pregrado con las y los alumnos de Medicina, Enfermería y Terapia Ocupacional. Pero este nuevo paso, que por fin estamos concretando”, dijo.
Tras la rotación de residentes de la especialidad médica de Medicina Familiar, el centro asistencial espera poder abrirse a la especialidad psiquiátrica.
Médica residente
La doctora Soledad Bustos dijo sentirse muy acogida por el personal y autoridades del hospital. “Nos han recibido muy bien, esperamos que este campo sea muy enriquecedor y creemos que así va a ser porque efectivamente está muy unida la salud familiar con la salud mental. En eso queremos hacer una retroalimentación entre ambos conceptos. Así es que creo que nos vamos a enriquecer mutuamente”, expresó.
La especialidad médica de medicina familiar tiene una duración de tres años y durante ese periodo las y los becados rotan por las áreas de medicina interna, urgencia y medicina ambulatoria, medicina interna, geriatría, pediatría y urgencia infantil, cuidados paliativos, atención primaria y medicina familiar, psiquiatría del adulto, psiquiatría infanto-juvenil comunitaria, neurología adulto, neurología infantil, neurofisiatría infantil, ginecología-obstetricia, traumatología infantil y adulto, otorrinolaringología, oftalmología, dermatología y cirugía menor.