Últimos avances en prevención y tratamiento de enfermedad renal fueron difundidos en IV Jornadas de Nefrología
En una modalidad híbrida, el Hospital Carlos van Buren y la Escuela de Medicina desarrollaron las IV Jornadas de Nefrología, en la que se dieron a conocer los últimos avances en la prevención y tratamiento de la enfermedad renal. La actividad de capacitación contó con exponentes nacionales e internacionales de diversas disciplinas como la nefrología, tanto pediátrica como adultos, geriatría y nutrición.
El impacto de la pandemia fue uno de los puntos tratados en las jornadas con ponencias que abordaron la telemedicina y el comportamiento del enfermo renal en Chile. El presidente de la Sociedad Chilena de Nefrología, doctor René Clavero, entregó cifras relacionadas con el tema. "Todavía estamos en pandemia y efectivamente, lo más preocupante es que la crisis sanitaria ha golpeado mucho a todos los pacientes que tenían algún grado de enfermedad renal crónica, tanto en la etapa pre dialítica como de todos aquellos pacientes que tienen algún tipo de terapia reemplazo. Por lo tanto, con estos datos estamos tratando de llevar al Ministerio de Salud toda la información para que se puedan tomar todas las medidas y recuperarnos pronto de esta situación”, dijo.
En el encuentro destacó la experiencia del Hospital Higueras de Talcahuano, cuyo equipo fue pionero a nivel país y latinoamericanos en telemedicina en nefrología. Los especialistas de dicho centro de salud, desarrollaron una estrategia de tratamiento a distancia con apoyo de la tecnología para la clínica de la enfermedad renal crónica, política pública que está siendo implementada a nivel país.
La doctora Elizabeth Hellman, nefróloga, docente de Medicina UV y directora de las jornadas, dio a conocer la réplica de dicho modelo de atención en el Hospital Carlos van Buren. Dentro de los beneficios, destacó el ahorro en los costos de traslado de los enfermos y mantención de la atención en tiempos de catástrofe. “Resultados internacionales de la telemedicina dan cuenta del impacto en la calidad de vida, dando mejoría, adherencia, costo y efectividad sobre las descompensaciones”.
Cambio de paradigma
Otro punto abordado en la actividad fue la experiencia de la innovadora y vanguardista Unidad de Control Renal Avanzado (UCRA) del Hospital Las Higueras de Talcahuano y sus resultados especialmente con la introducción del tratamiento conservador para la insuficiencia renal en el cual, el equipo de atención clínica maneja al paciente sin diálisis ni trasplante de riñón y, en cambio, pone el foco en la calidad de vida y el control de los síntomas.
“Los motivos de la elección no dialítica pueden ser por falta de recursos para diálisis/trasplante o por consenso médico-paciente, en países más desarrollado”, dijo y resaltó la importancia de la educación al paciente en este tratamiento, la que incide en el requerimiento de diálisis de urgencia.
El modelo de atención de salud renal contempla como pilares: el control clínico, nutrición, ejercicio, salud psicosocial y autocuidado. “El paciente es corresponsable de su salud. Es él con nosotros y eso cambia el paradigma. Este tratamiento debe ser transdisciplinario, no sólo ver números, sino ver al paciente como un todo”, expresó.
Durante los dos días también se abordaron diversos temas como: comportamiento epidemiológico del enfermo renal en Chile: desafíos post pandemia; osteoporosis en enfermedad renal crónica; cambios en el manejo nutricional en la enfermedad renal; prevención de enfermedad renal crónica en población pediátrica; fortaleciendo la integralidad y el cuidado continuo del paciente renal crónico desde la atención primaria al manejo por especialista; entre otras.