110 nuevos becados optaron por la UV para su especialización en Medicina
Un total de ciento diez médicos y médicas iniciaron este año su especialización médica en la Universidad de Valparaíso, siendo recibidos en una ceremonia online por las autoridades académicas encabezados por el decano de la Facultad de Medicina, doctor Antonio Orellana. Las postulaciones a estos programas médicos son a través de concursos que realiza el Ministerio de Salud.
Participaron además la directora de la Escuela de Medicina, doctora Catherine Soto; la directora de Postítulo y Postgrado de la Escuela de Medicina, doctora Viviana Lezana, y los directores de las distintas especialidades médicas, quienes dieron la bienvenida a las y los nuevos residentes.
Las y los médicos que optaron por la UV para su especialización, decidieron continuar sus estudios en las áreas de anestesiología, cardiología, cirugía vascular, cirugía general, cirugía pediátrica, cuidados intensivos, infectología, medicina de urgencia, medicina interna, medicina familiar, neurocirugía, neurología, neuropediatría, neurorradiología, oftalmología, obstetricia y ginecología, otorrinolaringología y pediatría, psiquiatría, psiquiatría infanto-juvenil, radiología e imagenología, traumatología , ortopedia y urología.
La duración de estos programas se extiende entre dos y cuatro años, dependiendo de la disciplina escogida. Estos son cursados -en forma simultánea- en los hospitales Carlos Van Buren, Eduardo Pereira y Del Salvador de Valparaíso, Gustavo Fricke y Naval Almirante Nef de Viña del Mar, de Quilpué, San Martín de Quillota, San Camilo de San Felipe, San Antonio de Putaendo y en los consultorios pertenecientes a las corporaciones municipales y dependientes de los servicios de Salud de la Región de Valparaíso. Además, la Escuela cuenta con cupos en la Región Metropolitana, en los hospitales “Dr. Raúl Yazigi” de la Fuerza Aérea de Chile, de Dipreca y Militar “Luis Felipe Brieba”.
La doctora Viviana Lezana instó a los nuevos becados que “valoren lo aprendido en cada momento; deténganse cada vez que sea necesario sin apuros a releer lo aprendido pero también a escuchar a los pacientes con calma, examinarlos con cariño y respeto. Disfruten de las conversaciones que se generen en su encuentro, miren a los ojos a los pacientes y familiares y dejen fluir las emociones y compasión. Esta conexión les permitirá llegar más rápido al diagnóstico, focalizar la solicitud de laboratorios a los más precisos pero, sobre todo, aliviar a los pacientes al acoger sus dudas y explicar de manera simple el plan de trabajo”.
Señaló que durante la pandemia se sumaron, a las exigentes condiciones sanitarias, modificaciones en la docencia por los cambios en las rotaciones como por la necesaria derivación de becados a áreas de atención con Covid. “Este escenario, lleno de dificultades, ha condicionado un esfuerzo adicional a la labor de los residentes pero se han superado los escollos gracias a su compromiso. Aprovecho esta oportunidad para agradecer y manifestar mi más profundo reconocimiento a la labor de nuestros residentes en estos difíciles momentos”, valoró.
Médico integral
El decano de la Facultad de Medicina, Antonio Orellana, también dedicó palabras a los nuevos residentes. “Hoy inician un camino de continuidad, el de la especialización, pero nunca pierdan los fines de la medicina que son la prevención, la promoción y la conservación de la salud, el alivio del dolor y del sufrimiento humano producto por la enfermedad, la atención a los pacientes que pueden ser curados y acompañar a los incurables, evitar la muerte prematura y luchar por la búsqueda de una muerte tranquila. La especialidad que hayan elegido no los exime de mantener vivos estos pensamientos, el médico logra su plenitud no cuando es especialista, sino cuando logra ser una buena persona, íntegra, para luego ser médico y, finalmente, un excelente especialista”.
En su bienvenida, la doctora Catherine Soto felicitó a las y los becados por llegar a la especialización que eligieron. “Hoy inician una nueva etapa de formación y estoy segura que al término llevarán consigo un enorme bagaje de experiencias aprendizajes y momentos de satisfacción. Puede que algunas circunstancias parezcan duras, pero esas experiencias constituirán también el profesional que ustedes llegarán a ser”, señaló.
Finalmente, el residente de tercer año de anestesiología, doctor Hernán Rubilar, destacó el alto nivel de los campos clínicos así como el centro de simulación de la Universidad de Valparaíso. Invitó a las y los nuevos becados a no olvidarse de su propia persona en este proceso de especialización que implicará una alta presión. Les recordó que “por sobre todo proceso formativo, primero estás tú, está tu salud física y tu salud mental, incluso por sobre la beca.(…) Agradece cada abrazo, cada café con un colega, a la persona que te escucha cuando estés agobiado y que se emocione con cada pequeño logro”.
La nota artística de la ceremonia estuvo a cargo del estudiante de Medicina Juan Pablo Montaño y su interpretación en el piano de Claro de Luna.