La académica de Medicina UV, Nicole Roldán Montenegro, se adjudicó un proyecto en el Concurso Fondecyt de Iniciación en Investigación 2026, convocado por la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo (ANID). Este proyecto busca desarrollar una herramienta molecular no invasiva y de bajo costo, con el objetivo de fortalecer la toma de decisiones quirúrgicas.
El cáncer de páncreas es una de las enfermedades oncológicas más agresivas, con una sobrevida a cinco años inferior al 10%, y su diagnóstico representa un desafío clínico relevante.
Hoy, muchos pacientes con lesiones pancreáticas detectadas por imágenes deben someterse a una biopsia mediante ecoendoscopía para confirmar si éstas son malignas, procedimiento invasivo, de alto costo, que no siempre entrega resultados concluyentes y además es de difícil acceso para la comunidad
Por ello, contar con una alternativa más accesible podría reducir de manera significativa la carga física, emocional y económica que este proceso impone a los pacientes y sus familias.
“Se descubrió hace unos años que el tumor del páncreas necesita un crecimiento avanzado y una tasa de muerte baja para el recambio celular. Cuando esas células se transportan a la sangre, se puede saber qué mutaciones hay y de dónde vienen”, explicó la Dra. Roldán.
Cirugía UV
El proyecto cuenta con la colaboración de residentes del programa de Cirugía UV. En efecto, la pregunta surgió de una conversación con el residente de cirugía Dr. Samuel Acuña y su mirada clínica, la que se complementó con el perfil químico de Nicole Roldán, bioquímica, Doctora en Ciencias con mención en química, quien ha consolidado una línea de investigación traslacional orientada a la salud. Ahora se suma al equipo la Dra. Pamela Poblete, que será colaboradora en la primera etapa del proyecto.
Se espera que los resultados del proyecto contribuyan a diagnósticos más oportunos, a una mejor selección de tratamientos y a una reducción significativa de los costos asociados al diagnóstico del cáncer de páncreas.
En el mediano plazo, esta investigación busca sentar las bases para una herramienta diagnóstica con impacto directo tanto en la atención de pacientes como en la eficiencia del sistema de salud.
La colaboración estrecha entre investigadores y equipos clínicos es fundamental para enfrentar patologías complejas como el cáncer. El diálogo entre la experiencia clínica y la investigación científica permite que surjan nuevas ideas orientadas a resolver problemas reales de la práctica médica, transformando necesidades no cubiertas en proyectos de investigación relacionados con medicina personalizada. Este trabajo en conjunto constituye una de las vías más efectivas para avanzar en diagnósticos más precisos, decisiones terapéuticas mejor informadas y estrategias de atención con impacto directo en los pacientes y en el sistema de salud de nuestro país.