Medicina socializó su renovación curricular con trabajo biestamental
Con el objetivo de socializar la renovación curricular del plan de estudio, la Escuela de Medicina desarrolló un claustro ampliado biestamental en el que participaron más de cien académicos y estudiantes de Casa Central y Campus San Felipe.
El trabajo colaborativo se llevó a cabo durante toda una jornada de sábado y en ella participaron profesores y estudiantes, representantes de los distintos cursos. Asimismo, asistieron autoridades académicas como el vicerrector académico, José Miguel Salazar; la directora de Pregrado, Jemima Fernández; el decano de la Facultad de Medicina, Antonio Orellana; el director de la Escuela, Rodrigo Vergara; la secretaria académica de Medicina Casa Central, Carolina Reyes, y la secretaria académica de San Felipe, Ana María Julio.
Abrió la jornada el vicerrector académico, quien expresó que el pensamiento colectivo y el diálogo es la única vía para alcanzar una ruta común. “Ante los tiempos de incertidumbre que vivimos, debemos tratar de juntar inteligencia colectiva, reunirnos, dialogar, para construir una ruta común que nos vaya moviendo en una dirección que nos tenga más o menos conforme”, dijo.
En tanto, el director de Escuela, agradeció la amplia presencia y el esfuerzo de los dos estamentos, así como el trabajo que ha realizado durante tres años la Comisión Curricular, que comenzó con el doctor José Toro y es integrada por docentes y alumnos representantes de ambas sedes. Esta comisión se ha reunido mensualmente desde su conformación.
Historia de la innovación curricular de Medicina
Los profesores David Jara y César González, integrantes de la Unidad de Gestión Curricular y Desarrollo Docente UV, entregaron un contexto del Proyecto Educativo UV y acompañamiento a la Comisión Curricular de Medicina.
Luego, la encargada de la Oficina de Educación Médica, Cecilia Montero, realizó un resumen de la historia reciente del trabajo de la Comisión Curricular, a modo de introducción al trabajo grupal. Posteriormente, cada mesa -integrada por alumnos y profesores- trabajó en una competencia de licenciatura o título de un total de quince que tributan al perfil de egreso de Medicina.
“Queremos que se posicionen, a partir de su experiencia, en la malla curricular, y como los integrantes de las mesas que los acompañan son representantes de asignaturas que tributan a esa misma competencia, puedan ponerse de acuerdo como todos tributamos a esa competencia”, explicó Cecilia Montero.
Curriculum dinámico
La carrera cuenta con instrumentos y procesos de acreditación nacionales o internacionales que obligan a hacer un trabajo sistematizado para poder identificar elementos que no están bien. “En base a eso, el curriculum debe ser dinámico, por eso hablamos de renovación curricular, porque nos movilizamos hacia donde el contexto nos pide que lo hagamos, y el contexto puede cambiar día a día”, agregó Montero.
En 2003, la Escuela de Medicina escogió un curriculum integrado, que implica una integración vertical y transversal, lo que demanda una comunicación entre docentes de diferentes departamentos. Por ello, la Comisión Curricular ha comenzado a trabajar en un organigrama funcional que permita la comunicación interasignaturas o entre ciclos (integración vertical).
En relación a la sobrecarga académica, la profesora indicó que quizás no es necesario cambiar nada, sino sólo respetar el horario y creditaje que está declarado, el cual en la práctica se ha visto sobrepasado en las horas indirectas. “Si se cumpliera lo declarado, ya sería un alivio porque esta carga académica se concibió con 40% menos de lo que le dedicábamos en la carga antigua. La diferencia es que antes era todo presencial, pero como ahora hay horas no presenciales, se abusa y eso ocurre por la falta de comunicación y coordinación entre los docentes”, aclaró.
Participantes
Para la profesora Karina Michea, docente de Casa Central, fue muy útil conocer la opinión de los alumnos y docentes, y valoró que se dé esta instancia de conversación.
María José Cardenas, académica de Campus San Felipe, dijo que se trató de una instancia enriquecedora. “Se dio una conversación bastante fluida; hay cosas por trabajar, pero tenemos todas las herramientas para mejorar”.
Para el jefe de cátedra de anestesiología, Fernando Aranda, el trabajo realizado en el claustro fue “muy interesante sobre todo cuando uno fue alumno hace tanto tiempo y desconoce cómo se ha manejado la educación médica en estos años. Hay brechas importantes que trabajar, especialmente en la capacitación docente”.
En tanto, Maximiliano Schuller, alumno de tercer año de San Felipe, opinó que “la jornada fue muy constructiva, ya que permitió analizar tanto las falencias como las fortalezas. En mi mesa no se dio la comparación entre los campus, sino cómo mejorar en ambos los mismos aspectos”.
Para Felipe Allendes, estudiante de segundo año Casa Central, valoró que la Escuela ofreciera el espacio para trabajar alumnos y docentes. “Es una instancia muy provechosa que considera nuestra opinión, lo que evidencia que la Escuela la construimos entre todos y no se hace entre cuatro paredes con algunas personas”.
“A fin de año queremos completar este proceso curricular que tendrá como insumo el trabajo de estas mesas. Además, hemos trabajado con la Vicerrectoría Académica y su Centro de Gestión, de los cuales tenemos todo el apoyo para realizar las readecuaciones curriculares, reorganizar o modernizar algunas. El trabajo de hoy va a tener sus frutos y vamos a poder hacer las modificaciones necesarias”, concluyó la secretaria académica, Carolina Reyes.